Tras pasar tres años en África, el capitán Bennet Wolfe regresó a Londres y descubrió que todos creían muerto y que, además, su socio lo había traicionado.
Mientras tanto, se trata de restablecer su reputación, el rudo aventurero se convierte en el blanco preferido de los jóvenes casaderas. Pero él sólo tiene ojos para la enigmática Lady Phillipa Eddison, una dama muy poco convencional.
Phillipa es más aficionada a leer que a coquetear. Sin embargo, todas las normas de cortejo y saber bien que se modifican y comportan son impropios de un caballero.
Bennet la escandaliza, pero al mismo tiempo se siente tan atraído por lo que resulta imposible no sucumbir una tentación tan salvaje como el hombre que provoca.
Escandalosa
Theresa Weller, Tess, es un ejemplo a seguir entre las damas de la alta sociedad londinense. Su comportamiento es siempre exquisito y refi nado, hasta que conoce a Bartholomew James, Tolly, un hombre rudo e insensible que encarna todo lo que un caballero no debería ser. Ella siempre se ha mantenido alejada de cualquier persona que no tuviera una reputación intachable, pero tras un único y ardiente beso, no puede quitarse de la cabeza a ese vividor. Por su parte, Tolly queda tan impresionado con Theresa que se esforzará por seguir las reglas de la buena educación para conquistarla, pues es consciente de que detrás de ese aparente recato se esconde una mujer capaz de despertar sus deseos más profundos.
Al capitán Bradshaw Carroway le encanta la vida de un marinero, aunque preferiría enfrentarse a una banda de piratas que se debe proteger a un grupo de aristócratas caprichosos. Sin embargo, una persona ha llamado su atención, un joven descargado que se encuentra a lo largo de las reglas del decoro, las cuales están sagradas a bordo. La señorita Zephyr Ponsley ha viajado por todo el mundo, pero no tiene experiencia en los límites del amor. Nadie ha enseñado a coquetear, aunque ha aprendido que las leyes de la seducción no siguen ninguna regla y que no hay aventura tan arriesgada y deliciosa como la pasión.
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