Una tragedia del pasado ha dejado a Lily Holmes con la carga de un devastador secreto…
Desde la muerte de su hermana gemela, Lily soporta que la toquen. Ni accidentalmente, ni casualmente… y mucho menos íntimamente. Esto le hace imposible confesarle a su mejor amigo Adam Roberts que está enamorada de él. No puede darle la clase de relación que necesita, así que lo observa en silencio mientras el planea su boda con otra persona.
Nikoli es un autoproclamado mujeriego, y quiere añadir a Lily a su lista de conquistas, pero ella no quiere tener nada con el… hasta que le hace una oferta que no puede rechazar. Le enseñara a disfrutar del contacto humano nuevamente, dándole la oportunidad de poder estar con Adam, mientras Nikoli utiliza todo su encanto para seducirla.
Lily adora los coches. Su padre era píloto, y creció bajo el capó de un coche y en la pista. Nikoli tiene un Plymouth Barracuda de 1970 edición limitada que ella quiere, por lo que le informa que los términos de su acuerdo también incluyen que él no puede dormir con nadie durante seis meses. Si lo hace, ella se queda con el coche. Si Lily cede y termina en su cama, su amada ‘Cuda seguirá con su dueño.
En una intrincada danza de control y rendición, una amistad reacia se trasforma en algo más. Lily empieza a anhelar cosas que nunca hubiera creído que haría, y Nikoli se da cuenta de que hay más en juego que su reputación.
Si Lily supera su fobia, ¿Deseará el toque de Adam tanto como empieza a desear el de Nikoli? ¿O encontrará placer en el toque de un mujeriego semi-reformado?
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