Después de las vacaciones de invierno, las chicas de la prestigiosa Academia de Longbourn se obsesionan con el baile de graduación. Lizzie Bennet, quien asiste a Longbourn con una beca, no está interesada en vestidos de diseñador y zapatos caros, pero su mejor amiga, Jane, podría estarlo—sobre todo ahora que Charles Bingley está de regreso después de un semestre en Londres.
Lizzie está feliz con el romance incipiente de su amiga, pero menos impresionada por el amigo de Charles, Will Darcy, quién es presumido y pretencioso. Darcy no parece no llevarse bien con Lizzie, por lo que ella asume es porque su familia no tiene dinero. Claramente, Will Darcy es un idiota pomposo— ¿entonces por qué Lizzie se siente atraída a él?
¿Podrán el orgullo de Lizzie y el prejuicio de Will mantenerlos separados? ¿O son una pareja más para el baile de graduación?
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miércoles, 25 de octubre de 2017
viernes, 8 de septiembre de 2017
¿Y si quedamos como amigos? Elizabeth Eulberg
Los chicos y las chicas pueden ser amigos.
Así me gusta, Levi. Directo al grano.
Yo sólo digo que es perfectamente posible que un chico y una chica sean amigos. Nunca he entendido cuál es el problema. O sea, sí, hemos tenido que soportar un montón de preguntas estúpidas.
Ah, ya, las preguntas.
“¿Están saliendo?”
“¿No? ¿Y por qué?”
“Pero algún beso sí se habrán dado, ¿no?”
“O lo habrán considerado…”
“¿Macallan, y cómo pudiste resistirte a los increíbles encantos de Levi?”
Nadie me preguntó eso.
Así me gusta, Levi. Directo al grano.
Yo sólo digo que es perfectamente posible que un chico y una chica sean amigos. Nunca he entendido cuál es el problema. O sea, sí, hemos tenido que soportar un montón de preguntas estúpidas.
Ah, ya, las preguntas.
“¿Están saliendo?”
“¿No? ¿Y por qué?”
“Pero algún beso sí se habrán dado, ¿no?”
“O lo habrán considerado…”
“¿Macallan, y cómo pudiste resistirte a los increíbles encantos de Levi?”
Nadie me preguntó eso.
martes, 9 de agosto de 2016
EL CLUB DE LOS CORAZONES SOLITARIOS, ELIZABETH EULBERG
Yo, Penny Lane Bloom, juro solemnemente no volver a salir con ningún chico en lo que queda de vida. De acuerdo, quizá cambie de opinión dentro de unos diez años, cuando ya no viva en Parkview, Illinois (EE UU), ni asista al instituto McKinley; pero, por el momento, he acabado con los chicos. Son unos mentirosos y unos estafadores. La escoria de la Tierra. Sí, desde el primero hasta el último. La maldad personificada.
Algunos parecen agradables, claro; pero en cuanto consiguen lo que buscan, se deshacen de ti y pasan al objetivo siguiente.
Así que he terminado.
No más chicos.
Puntos final.
MUCHO MAS QUE UN CLUB DE CHICAS
Yo, Penny Lane Bloom, estoy saliendo con alguien.
Exacto. La chica que fundó el Club de los Corazones Solitarios y juró no volver a quedar con chicos durante el resto de su vida tiene novio.
Y, no, las ranas no han criado pelo y no me he vuelto loca.
Ahora tengo el novio que merezco. Es amable, inteligente y divertido. ¡Ah! Se me olvidaba comentar que es un pibón.
Aunque, claro, siempre hay un pero…
Para nada quiero convertirme en una chica de esas. Ya sabes a cuáles me refiero: esas que dejan tiradas a sus amigas en el instante mismo que se echan novio.
He hecho un juramento: jamás seré así.
No puede ser tan difícil…».
Cuando Penny Lane creó el Club de los Corazones Solitarios con un solo miembro: ella, no podía imaginar que iba a convertirse en algo tan grande, que contaría con más de treinta socias que la apoyarían en todo lo que hiciera, y tampoco que podría llegar a cruzar las fronteras del instituto, y tal
vez del estado. Pero lo que tampoco imaginaba es que iba a encontrar al mejor chico del mundo: inteligente, cariñoso, comprensivo y… súper mono
MUCHO MAS QUE UN CLUB DE CHICAS
Yo, Penny Lane Bloom, estoy saliendo con alguien.
Exacto. La chica que fundó el Club de los Corazones Solitarios y juró no volver a quedar con chicos durante el resto de su vida tiene novio.
Y, no, las ranas no han criado pelo y no me he vuelto loca.
Ahora tengo el novio que merezco. Es amable, inteligente y divertido. ¡Ah! Se me olvidaba comentar que es un pibón.
Aunque, claro, siempre hay un pero…
Para nada quiero convertirme en una chica de esas. Ya sabes a cuáles me refiero: esas que dejan tiradas a sus amigas en el instante mismo que se echan novio.
He hecho un juramento: jamás seré así.
No puede ser tan difícil…».
Cuando Penny Lane creó el Club de los Corazones Solitarios con un solo miembro: ella, no podía imaginar que iba a convertirse en algo tan grande, que contaría con más de treinta socias que la apoyarían en todo lo que hiciera, y tampoco que podría llegar a cruzar las fronteras del instituto, y tal
vez del estado. Pero lo que tampoco imaginaba es que iba a encontrar al mejor chico del mundo: inteligente, cariñoso, comprensivo y… súper mono
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